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De la serie religiones del mundo: | |||
La Gran Rama | |||
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Creador | Drenévilo del Mar | ||
Profeta | Caracol | ||
Número de creyentes | Sesenta y algo en el último censo realizado en el 2000 y tantos | ||
Dogmas fundamentales | Dios es una rama | ||
No se puede... | Fumarse la rama | ||
Sí se debe... | Adorar a la rama | ||
Promesas principales | Dos novias en una semana | ||
Nivel de frikismo | Alto | ||
Máximo exponente | Andrés de la Gran Rama |
Única y verdadera religión en el universo. Fuente de sabiduría y poder infinito. Provocadora de fanatismo. Una gran fantochada.
La primera reencarnación de la Gran Rama se le presentó a Drenévilo del Mar, también conocido como el Sumo Sacerdote de la Gran Rama. Esta le informó que debía difundir la única y verdadera religión en el universo por todo el universo. Drenévilo del Mar aceptó la misión, y como todo lo que ha hecho, la hizo mal.
Por la negligencia del Sumo Sacerdote, la palabra de la Gran Rama no llegó a ser conocida más que por un puñado de personas que habitan en una región minúscula del universo, siendo aceptada por personas cuyo sano juicio es dudoso. Sin embargo, la Gran Rama se siguió reencarnando, y por vicitudes desconocidas por este narrador omnisapiente, se siguió presentando a Drenévilo del Mar, que fue adoptando distintos nombres.
Debido a la exploción de un volcán en la época preclásica de la culturas prehispánicas de la Nueva España, sucedidas por los años mil después de Jebús, Drenévilo del Mar llegó al Templo de La Gran Rama. Su palabra fue tomada al principio en broma, pero los efectos divinos de los estupefacientes mostraron a las conglomeración de cripis humanos del plantes sur que la religión de La Gran Rama era la única y verdadera religión del universo, como ya se dijo en un principio, ahora y hasta la hora del fin de los tiempos, así sea.
Los seguidores más fieles de este divina deidad se dieron en ese breve periodo de tres años en que Drenévilo del Mar estuvo en el CCH Sur, destacando quizá No Luis, Andrés De La Gran Rama, Jesús Cabañas, Chus Brenda de las Chuses, Zanahorio, y demás personajes destacados por la poca importancia que le ha dado la humanidad a sus vidas, tanto así que han logrado ser Grandes Desconocidos.
Sus seguidores llegaron a sumar El increíble número de sesenta y algo.
El profeta Caracol se presentó ante el General Juan Papas, quien se negaba a reconocer a la religión de la Gran Rama como la única y verdadera religión del universo, como se ha dicho por tercera vez en este escrito. Este, antes de su muerte, le informó que en el lugar de su entierro se aparecería la vigésima tercera reencarnación de la Gran Rama. Esto causó la envidia de Drenévilo del Mar, quien se creía el único con las facultades de escuchar al llamado de la Gran Rama. Pero eso es algo que sólo le importa a una telenovela.
Fueron en distintos sitios donde se contruyeron breves templos cuyo periodo de vida no fue mayor que de un día, destruido por las día bizarro cuando se logró construir una resistente estructura de ramas y troncos en un escondido lugar del CCH Sur. Esta estructura logró durar el tiempo récord de siete días, o sea, una semana, o un cuarto de mes, o 1/52 parte de un año, hasta que los enemigos del Gran Rama volvieron a encontrar el escondite.
Fue el Arquitecto del Templo de la Gran Rama quien acabó con la gente que vivía en el hoyo aliados de las Fuerzas del Mal, así se pudo tener una próspera paz que sólo pudo ser destruida por los conflictos internos y las Sectas Protestantes de la Gran Rama que después surgieron. La Gran Rama le recompensó con dos novias en una semana.
El Sumo Sacerdote se negó a aceptar que la vigésima tercera reencarnación de la Gran Rama había muerto, y era menester suyo buscar su reencarnación. Esto originó las primeras diviciones entre los seguidores del culto, destacando la hostilidad de Jesús Cabañas y Juan Papas contra Drenévilo del Mar, a quien lo acusaron de más de veinte delitos y formaron así las Fuerzas Rebeldes de la Gran Rama.
Así mismo, surgieron religiones alternas como fue el culto a La Gran Palma, y el más hostil de todos los grupos protestantes, El Árbol Blanco. Entre los tristes sucesos que esto desencadenó, fue la muerte de la Gran Rama a quien Andrés De La Gran Rama lloró.
En el 2007, un dios falso entonces conocido como El Gran Clavo logró desorientar las flácidas mentes de los integrantes del núcleo básico de creyentes de la gran rama. Dentro de los dominios del día bizarro, el gran clavo consiguió admiración ym credibilidad divina. Posiblemente también provocó indirectamente la conocida quemazón de marihuana en la casa de Enrique Albino.
Terminó el periodo de tiempo en que el Sumo Sacerdote debía estar en el CCH Sur, así como el de muchos de sus seguidores. Fue así como empezó la decadencia de su culto. Los fieles empezaron a incumplir sus funciones adoradoras, y las hojas de la religión se empezaron a secar.
En la actualidad quedan unos pocos seguidores de la Gran Rama por el CCH Sur, quienes no tienen la capacidad de conglomeración que alguna vez tuvo el Sumo Sacerdote. Sin embargo, han logrado construir una decente estructura como templo, según informantes.
La Gran Rama ha reencarnado en una infinidad de ramas, siendo que ahora he perdido la cuenta. Quizá la rama más famosa fue la que reencarnó en una planta de marihuana, desapareciendo misteriosamente entre una nube de humo. La más longeva tal vez sea la vigésima reencarnación de la gran rama, y la más fotografiada esta que en el lado derecho de este artículo.
La Gran Rama puede ser adorada de distintas formas, dándoles la libertad a sus creyentes de inventarse el rito que más le convenga. La acción ritual con mayor consenso es el bautismo. Un creyente de la Gran Rama puede ser bautizado, y por lo tanto volverse formalmente creyente, cuando éste es tocado por la Gran Rama mientras un sacerdote de dicha religión dice "La Gran Rama te bendice".
Otras formas rituales comunes son largas procesiones llevando la Gran Rama. Algunos lanzan cantos como "Hare Rama, Hare Rama, Hare Hare".
Las bendiciones de la Gran Rama son infinitamente desconocidas. Sin embargo, se le adjudica haberle otorgado al Arquitecto de la Gran Rama dos novias en una semana. Primero tuvo una y no le gustó, teniendo la posibilidad de intercambiarla por otra en un acto clásico conocido como "la catafixia de chavelo".
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